La situación originada por la Policía de la Provincia de Buenos Aires se ha traducido en un hecho político trascendente y, lo que es preocupante, ignorando como finaliza toda esta \»movida\». Yo no quiero imaginar, pero estoy obligado a hacerlo y preguntarme qué hay detrás de la movilización policial que se atreven a ir uniformados y armados a la puerta de la Quinta Presidencial de Olivos, donde habita el presidente de la Nación, Dr. Alberto Fernández, para hacer entrega de un petitorio.
Se han salido del cauce de la normalidad, pero lo que es aún peor el gesto de enfrentar a la máxima autoridad política de la República. Es un hecho inédito que nosotros repudiamos con toda nuestra fuerza y exigimos, como ciudadanos de a pie, que depongan esta actitud patoteril indigna de un hombre uniformado, que tantos otros y no tan lejos de ahora hicieron honor vistiéndolo. Depongan la actitud de prepotencia, restablezcan el equilibrio moral y profesional y hagan abandono de todo gesto de prepotencia rayano en la violación de leyes y reglamentos que les inhibe este procedimiento.
Más allá de la justicia del reclamo, les solicitamos que prime el sentido común. Ustedes son custodios de la ley y ahora están violando flagrantemente.
La sociedad no les perdonará este verdadero exceso, repito, rayano en la imprudencia y la falta de equilibrio que todo profesional que porta armas debe hacer honor.
LORENZO A. PEPE
Diputado de la Nación
Secretario General
Ad-Honorem